Naciste para escribir una historia de grandeza, desde tu ascenso, hasta los años lúcidos y majestuosos en la década de los 70, tu último campeonato en el 97, hasta la final de la Copa Libertadores en 2001.
Eres una institución grande, con los colores más hermosos de México, con una afición que te ama una y otra vez sin importar los tropiezos, gente que te alienta cada 8 días solo para escuchar “GOL DE CRUZ AZUL”. Y es que tan solo con escuchar o pronunciar tu nombre, nos vibra el corazón y la ilusión de volver a verte campeón.